Los probióticos, que son conocidos por ser beneficiosos para el sistema digestivo y el desarrollo del sistema inmunológico y el metabolismo, según las investigaciones también podrían ser beneficiosos para la salud mental y el estado de ánimo.
Cada vez más investigaciones indican que los problemas en el sistema intestinal podrían impactar directamente en la salud mental causando problemas como ansiedad y depresión, por lo que puede haber una buena razón por la que uno se siente bien después de tomar un yogur, kéfir o chucrut.
Los probióticos, según las investigaciones benefician a la salud mental y al bienestar debido a la relación que existe entre el cerebro y el intestino.
Le explicamos a continuación cómo los probióticos alteran la función cerebral, el comportamiento y el estado de ánimo según varios estudios realizados:
- Según un estudio realizado recientemente, las personas que tomaron un producto lácteo fermentado con una mezcla de probióticos durante 4 semanas, influyó en la actividad cerebral de los pacientes
- Otro estudio mostró una mejora del estado de ánimo en voluntarios sanos tras el consumo durante 3 semanas de una bebida de leche con probióticos.
- Un estudio reciente observó que los pacientes, tras el consumo durante 30 días de una mezcla probiótica, mostraron una mejora en los estados de ansiedad y depresivos así como se disminuyeron los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
En general, los estudios realizados han mostrado una clara evidencia del vínculo existente entre la microbiota y el estado emocional.
Este vínculo entre la salud intestinal y el estado de ánimo no debería sorprender, pues es conocido que una disfunción en la flora intestinal normal puede producir una multitud de enfermedades, sin embargo sí puede ser sorprendente que afecte al estado de ánimo y a la salud mental.
Según los estudios la microbiota intestinal puede ser modulada con el uso de probióticos y podría ser una gran terapia para las enfermedades asociadas con la microbiota, incluyendo la función neuropsicológica ya que benefician en varias áreas como puede ser en la influencia directa que tienen en la producción de neurotransmisores, la prevención de las alteraciones inducidas por el estrés, la activación directa de las vías neuronales o la limitación de la producción de citoquinas inflamatorias entre otros.
Para concluir se puede determinar que según los estudios realizados y el vínculo existente entre la flora intestinal y la salud mental, los probióticos pueden ayudar a los estados de ansiedad y depresión y proporcionan beneficios para la cognición y el comportamiento a través de la comunicación intestino-cerebro.
Por todo ello, incluir los probióticos en su dieta no solo ayuda a mantener una buena salud en general sino que también son beneficiosos para el estado de ánimo y la salud mental.
Algunos de los alimentos probióticos que puede incluir en su dieta son el yogur, kéfir, kimchi, tempeh, sopa de miso o los quesos blandos.