La transpiración producida por las glándulas
endocrinas produce un olor corporal muy desagradable para nuestro
sensible sentido del olfato, tanto es así, que el hombre desde tiempos
antiguos busco la manera de apalear ese terrible olor que genera la sudoración.
Hoy la mayor parte de la gente nos
compramos esencias, desodorantes y perfumes químicos, para cubrir estos
malos olores que nos generan incomodidad e incluso algunas veces burlas
de las demás personas que nos rodean.
Cabe preguntarse: ¿Estamos solucionando
con estos métodos el problema de raíz? Pues claro que no! Solo estamos
disfrazando un olor por otro olor que resulta más agradable para
nuestros sentidos, es por eso que en este artículo te presentamos,
cuatro formas distintas de atacar la sudoración de raíz y de forma cien
por ciento natural.
Hablemos un poco sobre la sudoración
Las glándulas endocrinas son el tipo más
abundante de glándulas sudoríparas, se encuentran por toda la piel y
empiezan a funcionar inmediatamente después del nacimiento y liberan una
solución diluida de sal.
La sudoración,
es el mecanismo de nuestro cuerpo para mantenernos frescos y evitar que
nos sobre-calentemos en un ambiente con mucho calor, o cuando hacemos
actividades físicas, cuando experimentamos emociones fuertes,
estresantes o durante cambios hormonales.
La sudoración excesiva
más común suele producirse en la región de las axilas, pero también al
tratarse de un desequilibrio pueden sudar en exceso las manos, a tal
punto de que la persona debe estar secándolas permanentemente.
También es el caso que los pies
transpiren demasiado o las zonas genitales del cuerpo, debido al
encierro en el cual se encuentran, a la ropa que usamos que por lo
general es sintética.
El exceso de sudor
es uno de los trastornos que más afectan en la autoestima del
individuo, ya que se siente incomodo donde quiera que va, muchas veces
no sabiendo que hacer en el momento o recurriendo periódicamente a
lavarse, para no expeler ese incomodo y mal olor.
La transpiración
no es mala en su justa medida, ya que a través de ella, nuestro cuerpo
se limpia de una gran cantidad de malas influencias y toxinas, por medio
de los múltiples poros de nuestra piel, sin embargo, cuando la
sudoración es imparable, tampoco es normal, ya que se puede deber a un
desequilibrio orgánico, no grave, pero que sí necesita de la ayuda de un
especialista.
Remedio casero para el mal olor en las axilas y otras partes del cuerpo:
1- Lavarse 2 veces al día (todos los
días) con una esponja vegetal, agua y jabón de glicerina idealmente.
Tener especial cuidado al enjuagar y secar muy bien la zona (sin que
quede ningún resto de jabón o desodorante) ya que se descomponen cuando
se mezclan con la transpiración.
2- Cuando las axilas y pies, estén bien
limpios y secos, aplicar bicarbonato utilizando un trozo de algodón, la
propiedad del bicarbonato es que impide el mal olor y lo mantiene mucho
más seco y por más tiempo. El bicarbonato de sodio, en base a mi
experiencia, es el mejor desodorante que existe y el más económico, no
tienes que estar gastando plata demás comprando productos químicos que
parte de dañar la piel, no curan la sudoración excesiva de raíz.
3- Mezclar dos partes de vinagre con una de alcohol y aplicar todas las noches en axilas y pies limpios.
4- El Aloe Vera, también actúa como
desodorante natural, se aplica el jugo en las axilas y pies limpios y
secos. El Aloe Vera ayuda a combatir los hongos y mejora el aspecto de
la piel (puede que manche la ropa por lo que no es conveniente aplicarlo
si se va a poner prendas de color claro).